Cabañas en Bariloche Precios
Introducción: Tu guía para encontrar cabañas accesibles y de lujo en la Patagonia
¡Che, compañeros viajeros! Acá Tina Moretti, reportando en vivo (o tan en vivo como mi Lola camper van lo permite) desde el corazón de la Patagonia. Ya me conocen, lo mío es el viaje tranquilo, el lujo rústico y encontrar esas experiencias bien locales. Y cuando se trata de Bariloche, mi base actual y un lugar que ya siento como mi segunda casa, hay un tipo de alojamiento que captura la verdadera onda de esta región increíble: la cabaña.
Olvidate un toque de las habitaciones de hotel esas todas iguales. Acá, las cabañas son donde pasa la magia. Te ofrecen esa mezcla perfecta de encanto de montaña y comodidad hogareña, muchas veces con un hogar a leña crepitando y una cocina donde podés preparar algo rico (¡o simplemente calentar las empanadas de ayer, sin drama!). Son tu pedacito privado de paraíso patagónico, ya sea que vengas a esquiar, a recorrer los lagos, o simplemente a tomar un Malbec viendo el atardecer sobre el Nahuel Huapi. Pero seamos sinceros, antes de meternos en descripciones de ensueño, tenemos que hablar de los precios – ¡la guita! Porque hasta una espíritu libre como yo necesita saber cómo viene la mano cuando se trata de armar el presupuesto para la aventura.
Entonces, ¿qué onda con los precios de las cabañas en Bariloche? Bueno, es un poco como andar por un sendero de montaña: hay subidas y bajadas, y tenés que saber qué esperar. En promedio, vas a encontrar precios de alrededor de ARS 85.300 por noche, pero ojo, eso puede trepar a ARS 134.244 los fines de semana. Para mis amigos internacionales, eso es más o menos $80-$130 USD por noche, depende de la plataforma y el tipo de cambio. Me acuerdo una vez que quise reservar una cabaña a último momento en temporada de esquí, ¡y los precios estaban tan salados que la Lola casi se niega a arrancar! Fue un buen recordatorio de que la espontaneidad tiene sus límites, especialmente en temporada alta.
Y hablando de temporada alta, escuchá bien: junio suele ser el mes más caro, con precios que pueden volar por las nubes un 72% (¡hola, temporada de esquí!). Mayo, por otro lado, puede ser una ganga, con bajas de alrededor del 46%. Así que, si tenés flexibilidad, apuntale a las temporadas intermedias. Además del calendario, la ubicación lo es todo. Las vistas al lago, la cercanía a Cerro Catedral o estar justo en el centro de la ciudad, obvio que te van a salir más caras. Y esas comodidades increíbles – piletas privadas, spas, que acepten mascotas – todo suma al precio. Siempre chequeá si hay costos extra como tasas ecológicas o cargos por huéspedes adicionales.
¡Ahora lo divertido! Hablemos de algunas de las cabañas increíbles que descubrí (o con las que soñé) en Bariloche. Cada una te ofrece un toque único de la hospitalidad patagónica.
¡Ah, Bosque del Nahuel! El nombre mismo, "Bosque del Nahuel", susurra promesas de tranquilidad. Este lugar es una joyita para cualquiera que busque una escapada tranquila, envuelto en el abrazo de un frondoso bosque patagónico. Está un poco alejado del quilombo de la ciudad, que para mí es justo lo que busco después de un día largo de explorar. Imaginá despertarte con el sonido de los pájaros, el olor a pino, y después salir a caminar desde tu puerta. Las cabañas son amplias, modernas y tienen todo lo que necesitás, incluyendo un hogar a leña para esas noches frescas, ¡un sí o sí para mí!
Me acuerdo de una mañana fresca de otoño, después de una larga caminata por el Parque Municipal Llao Llao, volví a una cabaña por acá (bueno, una parecida, porque en esta específica todavía no me quedé, ¡pero está en mi lista!). La calidez del hogar a leña, la cocina totalmente equipada donde pude prepararme un buen mate, y el silencio absoluto del entorno fueron pura felicidad. Es el tipo de lugar donde te desconectás de verdad y recargás pilas. Además, con una pileta cubierta climatizada y un spa, suena como el lugar perfecto para relajar esos músculos cansados después de un día de aventuras en la montaña.
Para los que viven para la nieve, Los Nires Lodge en Cerro Catedral es su sueño absoluto. Esto no es solo un lugar para dormir; es una plataforma de lanzamiento para días de esquí épicos. Estar a solo 15 minutos a pata del centro de esquí Cerro Catedral significa que podés estar en las pistas antes de que te caiga el primer café. Y después de un día surfeando la nieve patagónica, ¿qué podría ser mejor que volver a un lodge acogedor con piletas cubiertas y al aire libre?
La primera vez que esquié en Bariloche, me quedé en una cabañita chiquita y rústica justo cerca de la base del Cerro Catedral. Era encantadora, ¡pero pasaba la mitad del tiempo tratando de secar mi equipo! Los Nires, con sus servicios como guardaesquíes y sala de juegos, suena como una forma mucho más organizada (y lujosa) de vivir la montaña. Además, permiten mascotas bajo petición, lo cual es un golazo para mí – ¡a Lola le encanta un buen día de nieve, aunque sea solo mirando desde una ventana calentita! Un pequeño consejo de viajera a viajera: siempre chequen si el desayuno está incluido. A veces, los detalles pueden variar, ¡y un buen desayuno es clave para un día en las pistas!
¡Ay, el romanticismo puro de una cabaña frente al lago! Cabañas Las Marías del Nahuel ofrece justamente eso: acceso directo a las aguas brillantes del Lago Nahuel Huapi. Solo las vistas ya valen el viaje. Estas cabañas encarnan ese estilo alpino clásico, combinando madera rústica y piedra con todas las comodidades que necesitás. Es el tipo de lugar donde podés pasar horas solo mirando el agua, viendo cómo cambia la luz en las montañas.
Una vez pasé una tarde de verano haciendo paddleboard en el Nahuel Huapi, y la sensación de estar en ese lago vasto y transparente fue inolvidable. ¡Imaginá tener eso justo en tu puerta! Las Marías del Nahuel incluso tiene una zona de playa privada, lo cual es un lujo poco común. Y acá va un dato divertido sobre mí: me niego a viajar a cualquier lugar que no tenga al menos una panadería y una superstición local rara. Así que encontrar un lugar que no solo sea impresionante sino que también acepte mascotas (¡Lola es mi compañera de viaje peluda, después de todo!) y esté cerca de Playa Bonita (¡que seguro tiene una panadería buenísima!) es un golazo para mí. Solo recordá esa pequeña tasa ecológica – es una pavada de precio para preservar esta increíble belleza natural.
Complejo Los Arrayanes suena como el tipo de lugar que al toque se siente como en casa. Está cerca de Playa Bonita, justo en la calle principal de Bariloche, lo que significa que tenés lo mejor de dos mundos: un jardín tranquilo y fácil acceso a supermercados y colectivos. Para familias o grupos que les gusta cocinar sus propias comidas y disfrutar de un ambiente relajado, esta es una opción fantástica. Las cabañas están bien equipadas, lo que facilita instalarse y ponerse cómodo.
Soy una gran creyente en conocer un lugar a través de sus mercados locales y panaderías. Tener un supermercado cerca en Los Arrayanes significa que podés comprar productos frescos, quesos regionales y, por supuesto, ¡muchos alfajores! Una vez, me estaba quedando en una cabaña un poco demasiado remota y me quedé sin yerba mate. ¡Fue una crisis menor! Así que la conveniencia de Los Arrayanes, combinada con su onda "hogareña", realmente me atrae. Son esos pequeños detalles los que hacen una gran diferencia cuando estás de viaje.
Ahora, si estás buscando un toque de lujo rústico, La Cascada Casa Patagónica by DON te está llamando. Si bien es más una "casa patagónica" u hotel, encarna absolutamente el espíritu de una experiencia de cabaña de alta gama con su enfoque en el entorno natural deslumbrante, la cascada privada y esas increíbles vistas al Lago Nahuel Huapi. Acá es donde vas cuando querés que te mimen, rodeado de belleza, y tener una variedad de actividades al alcance de la mano.
Lo mío es el viaje tranquilo, pero a veces, un poco de mimos es justo lo que el alma necesita. Imaginá pasar un día de trekking, luego volver a una pileta cubierta climatizada con vistas panorámicas, seguido de un masaje en el spa. ¡Pura felicidad! Aunque suelo preferir una onda más "fuera de lo común", un lugar como La Cascada ofrece esa mezcla perfecta de inmersión en la naturaleza y comodidad refinada. Me recuerda a esos lodges ecológicos boutique que me encanta reseñar, donde cada detalle está pensado y la belleza natural se celebra. Es un gusto, quizás, pero por esas vistas y ese nivel de relax, suena como una experiencia patagónica inolvidable.
Cabañas Allá Ité, escondida junto al Lago Gutiérrez, es el tipo de lugar que me roba el corazón: auténtico, tranquilo y con ese toque personal divino de los dueños. Ya saben que me encanta encontrar esas joyitas escondidas donde la gente hace toda la diferencia, y el hecho de que los dueños vivan en el lugar significa que tenés hospitalidad patagónica de verdad. Imaginá despertarte con el sonido del lago, salir y tener kayaks a tu disposición para remar a la mañana. ¡Pura felicidad!
Una vez me quedé en una pequeña posada familiar cerca de Salta, y los dueños me trataron como de la familia, contándome historias y datos locales que no encontrás en ninguna guía. Allá Ité me recuerda esa calidez. Además, con una mini-pileta exterior climatizada y jacuzzi (¡temporada, claro!), es perfecto para relajarse después de un día de explorar. Y sí, Lola estaría re contenta, ¡aceptan mascotas! Son esos detalles pensados, como los kayaks de cortesía, los que hacen que una estadía sea realmente memorable y única.
Arelauquen Bungalows & Suites es donde el lujo se encuentra con la naturaleza, escondido dentro de un club privado de golf y polo. Esto es para los que buscan exclusividad, vistas espectaculares y quizás una ronda de golf o un paseo a caballo por paisajes vírgenes. Si bien es un poco lejos para ir y venir si no tenés tu propio auto (¡créanme, conozco el quilombo de intentar parar un taxi en la Patagonia remota!), la sensación de seguridad y la belleza pura del entorno lo convierten en una escapada única.
Siempre me atrajeron los lugares que ofrecen más que una cama; lugares donde el entorno en sí es parte de la experiencia. Las "vistas épicas perfectas cada mañana" mencionadas por los huéspedes acá suenan como el tipo de despertador que me gusta. Si bien soy más fanática del paddleboarding y el trekking que del golf, la gran cantidad de actividades disponibles, desde deportes acuáticos hasta tenis, significa que hay algo para todos. Es el tipo de lugar donde realmente podés sumergirte en el paisaje patagónico, aunque con un toque de elegancia refinada.
Huinid Bustillo Cabañas ofrece esa combinación mágica: la privacidad y el encanto de una cabaña, pero con todas las chiches de un hotel de primera. Imaginá despertarte con vistas panorámicas del Lago Nahuel Huapi, rodeado de exuberantes jardines y bosque nativo, pero estando a solo unos minutos del centro de la ciudad. Es lo mejor de dos mundos para familias o grupos que quieren comodidad y conveniencia sin sacrificar esa conexión con la naturaleza.
Me encanta un buen día de spa, especialmente después de una caminata larga, así que la pileta cubierta climatizada y el spa completo acá me llaman la atención. Me recuerda a una vez que encontré unas termas escondidas en las montañas, ¡pura relajación! Huinid Bustillo también tiene un restaurante en el lugar que sirve "exquisitos platos de autor", lo cual siempre es un gusto. Y para los que viajamos con nuestros amigos peludos, la política de aceptar mascotas (aunque pueden aplicarse cargos, ¡así que siempre chequeá!) es un gran punto a favor. Solo un ojo: parece que hay un pequeño misterio sobre si el desayuno está incluido, ¡así que asegurate de confirmarlo cuando reserves!
A veces, solo necesitás un lugar simple y cómodo que te lleve donde necesitás sin desangrar la billetera. Cascada del Sur suena como esa joya práctica. Ubicado al pie del Cerro Otto y camino a Cerro Catedral, está perfectamente posicionado tanto para explorar la ciudad como para las aventuras en la montaña. Acá no se trata de lujos exagerados, sino de comodidad garantizada y un excelente punto de partida para tus escapadas en Bariloche.
Tuve mis buenas estadías simples y sin lujos que resultaron increíblemente memorables por su ubicación y la calidez del lugar. La mención de "calefacción por piso radiante" en Cascada del Sur me llamó la atención al instante – después de un día afuera en el frío patagónico, ¡eso es puro lujo! Si bien algunas reseñas sugieren que es "lo justo y necesario" sin muchos extras, a veces eso es todo lo que necesitás. Me recuerda que las mejores experiencias de viaje no siempre son hoteles cinco estrellas, sino encontrar lo que va con tu aventura y tu bolsillo.
Bariloche es un tesoro de verdad, que ofrece una variedad increíble de cabañas que se adaptan a todo tipo de viajero y presupuesto. Desde los refugios de lujo frente al lago con extensas instalaciones de spa hasta cabañas acogedoras, manejadas por sus dueños, que enfatizan el servicio personalizado y la inmersión en la naturaleza, las opciones son muchísimas. Mi recorrido por estas propiedades revela algunos puntos clave para planificar tu escapada patagónica inolvidable.
Primero, siempre tené un ojo en los precios, que varían mucho. Recordá que los meses pico de invierno y verano los precios van a estar más altos, así que si tenés flexibilidad, considerá las temporadas bajas o quedarte entre semana para conseguir mejores precios. ¡Y no te olvides de comparar precios en distintas plataformas de reserva, unos clics extra te pueden ahorrar muchos pesos! También, ojo con esos cargos extra, como las tasas ecológicas o tarifas por huéspedes adicionales y servicios específicos, para que tu presupuesto no se te vaya al tacho.
Segundo, ¡ubicación, ubicación, ubicación! Ya sea que sueñes con despertarte con vistas al lago, estar a pasos de las pistas de esquí o tener fácil acceso al encanto de la ciudad, la ubicación de tu cabaña va a definir toda tu experiencia. Decidí si preferís un retiro en la naturaleza bien apartado o una base más accesible que combine la belleza natural con las comodidades de la ciudad.
Finalmente, pensá en el tipo de servicios y atención que más te importan. ¿Buscás servicios completos de hotel, incluyendo restaurantes y spas en el lugar, para unas vacaciones donde no te movés de un lugar? ¿O preferís las comodidades esenciales en un ambiente cálido y hogareño, quizás con el toque personal de los dueños? Características específicas como que acepten mascotas o piletas climatizadas pueden ser un cambio total, pero siempre verificá si están disponibles según la temporada o si tienen costo extra.
En definitiva, la cabaña ideal en Bariloche es la que se ajusta perfectamente a lo que buscás en cuanto a ubicación, servicios, presupuesto y la onda general que querés para tu aventura patagónica. Teniendo en cuenta estos consejos, podés elegir con confianza una cabaña que te promete una estadía realmente inolvidable.